Ideaciones suicidas: reconociendo señales de advertencia

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Las ideaciones suicidas en la actualidad han sido más vistas, aunque no es algo nuevo, es un tema que se ha hablado un poco más en la sociedad. Aunque sigue existiendo un estigma gigante en torno a este tema, se podría decir que se ha hablado un poco más. Luego de la pandemia, sus números aumentaron debido a la tensión que generó.

Según estudios, los suicidios ocurren en personas entre 15 y 29 años de edad, los jóvenes, el futuro de una nación (como siempre dicen). Las ideaciones suicidas, pensamientos o el comportamiento suicida son un problema de todos, no solo le corresponde a quien lo piensa o lo hace, como sociedad también deberíamos integrarnos.

Es por ello que en este artículo hablaremos sobre qué son las ideaciones suicidas, cuáles son las señales de advertencias y cómo puedo ser un agente de cambio o apoyo.

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Ideaciones suicidas
Ideaciones suicidas

¿Qué son las ideaciones suicidas?

La ideación suicida se puede definir como la presencia de pensamientos o deseos de muerte persistentes, el pensamiento constante de querer morirse. Las ideaciones suicidas representan, por decirlo de alguna manera, la primera fase de lo que se conoce como conducta suicida.

En el manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-5) su definición hace referencia a aquellos pensamientos sobre autolesiones, considerándose de manera deliberada o la planificación de las posibles estrategias que usaría para ocasionarse la propia muerte.

Las ideaciones suicidas pueden variar entre los planes y el grado de intención suicida. Es importante aclarar que, el hecho de que una persona tenga ideaciones suicidas no implica que vaya a actuar sobre esos pensamientos, pero que siempre son una señal de alarma.

Como se menciona al inicio, las ideaciones suicidas son un problema que se vuelve social, aunque en un entorno lo pueda presentar una única persona. La cantidad de estigma que existe en torno a este tema es fenomenal (pero no con orgullo).

Las ideaciones suicidas son un problema de salud pública y que, dado los mitos que surgen a partir de esta problemática, les es difícil a las personas que experimentan esta situación hablarlo. Los mitos o frases invalidantes más comunes que se pueden escuchar son las siguientes.

  • Quien habla de suicidio no lo hace.
  • El suicidio es un acto de cobardía o egoísmo.
  • Preguntar sobre el suicidio es dar la idea a alguien.
  • Es muy joven, ¿Qué problemas puede tener si tiene todo?

Estos son solo algunos de los comentarios que se pueden llegar a escuchar, incluso en la actualidad, con toda esta visibilidad que se le está dando a la salud mental.

Las ideaciones suicidas son un grito de ayuda. Estos se suelen manifestar debido a un dolor emocional, dolor que muchas veces ni la propia persona entiende; es por ello que es importante brindar acompañamiento emocional.

Si estás teniendo este tipo de pensamientos o sientes dolor emocional, agobio o te sientes vacía, no dudes en buscar ayuda profesional. Contáctanos y agenda una sesión, da el primer paso hacia el entendimiento de tu malestar.

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Reconociendo las señales de advertencia

Estudios revelan que de cada diez personas que mueren por suicidio, nueve de ellas manifestaron claramente sus ideaciones suicidas o sus propósitos. Reconocer las señales de alerta puede ayudar a que se generen entornos seguros y que los familiares o amigos puedan actuar.

Es importante aclarar que no siempre existen estas verbalizaciones o se observan señales de alarma, ya que existen personas que ocultan muchas veces sus intenciones debido al temor de ser juzgados o ignorados.

Las conductas que puedes observar son las siguientes:

  • Que la persona verbalice abiertamente la intención de querer suicidarse.
  • Que lleve a cabo conductas de cierre como cuentas bancarias, testamentos, regalar sus pertenencias o que se despida de las personas.
  • Cambios bruscos en su estado de ánimo.
  • Aislamiento social.
  • Conductas autolesivas (aunque no siempre ocurre).
  • Desesperanza o inutilidad.
  • Tristeza o soledad.
  • Dolor emocional.
  • Hablar de sentirse una carga para los demás.
  • Señales verbales como decir que es mejor no estar vivo.

La persona que experimenta ideaciones suicidas también puede vivir con otros trastornos, como lo es el trastorno depresivo mayor, trastorno límite de personalidad o trastorno bipolar. Aunque estos se tomen como factores de riesgo, puede aumentar la probabilidad de que las ideaciones suicidas se cumplan.

Si te sientes identificado/a con alguna de estas señales de advertencia, no dudes en buscar ayuda. La terapia es un espacio seguro, confiable y donde no serás juzgado. Contáctanos y agenda una sesión.

Estrategias de ayuda

Nunca se puede saber lo que está sucediendo exactamente en la cabeza de una persona, por mucho que digas conocerla durante años, de la única forma de saberlo exactamente es que lo expresa. Como se ha mencionado, muy pocas personas expresan tener ideaciones suicidas por miedo a ser juzgadas, para ello es importante desarrollar estrategias de ayuda tanto para sí mismo como para el entorno si alguien te está comunicando estos pensamientos.

Los puntos a considerar para ayudarte a gestionar estos pensamientos son los siguientes:

  • Ten en cuenta que no estás solo: puedes hablar con una persona, incluso un profesional de la salud mental.
  • Autocuidado: duerme las horas necesarias, el sueño es vital para el cuerpo.
  • Evita el consumo de alcohol o drogas.
  • Permanece acompañado.
  • Establece un plan de seguridad que le puedas expresar a otra persona.
    • Identifica tus señales de alarma.
    • Identifica tus redes de apoyo.
    • Contacta con tus redes de apoyo.
    • Cuidado 24hrs
  • Haz pequeñas actividades de disfrute”.

Existen estrategias que se pueden aplicar si tienes un amigo o familiar que esté experimentando un dolor emocional:

  • Escucha sin juzgar.
  • Pregunta de forma directa y segura sobre los pensamientos.
  • No dejes a la persona sola.
  • Busca ayuda profesional de inmediato.

Es importante tener en cuenta que, incluso aunque estés 24 horas con la persona y llegase en algún momento, hacerse daño no implica que sea tu culpa, sé amable contigo mismo, las redes de apoyo emocional también deben cuidarse.

Conclusiones

Los pensamientos negativos lo pueden experimentar todos los seres humanos alguna vez en la vida, pero luego pueden existir casos donde experimenten ideaciones suicidas. Esto se da debido a la historia de vida de la persona, dolor emocional o por la presencia de otros trastornos.

El suicido es un problema gigante de la salud pública que tiene consecuencias sociales y emocionales de gran alcance. No podemos seguir ignorando el elefante rosa en la habitación.

Sabías que el mes de septiembre es denominado mes amarillo por la prevención del suicidio, La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha decretado el 10 de septiembre como el día mundial para la prevención del suicidio. El objetivo es concientizar que el suicidio puede prevenirse.

No solo nos quedemos con el hecho de que ya se le otorgó una fecha, un mes o un color. Da importancia al tema, escucha sin juzgar y sin importar que tan joven es la persona que te esté hablando; su dolor es lícito, solo esa persona lo conoce.

Referencias

Toro-Tobar, Ronald Alberto, Grajales-Giraldo, Francy Lorena, & Sarmiento-López, Julián Camilo. (2016). Riesgo suicida según la tríada cognitiva negativa, ideación, desesperanza y depresión. Aquichan16(4), 473-486. 

World Health Organization. (2021, June 17). Suicidio. Who.int; World Health Organization: WHO.

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La tristeza es un estado de ánimo que puede ser muy intenso, pero esto no implica que ocurran los pensamientos suicidas.
Escribe tus pensamientos, usa estrategias de regulación emocional, ve a terapia, conecta con tu entorno de apoyo.
No necesariamente, se deben cumplir otros factores para ello.

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Imagen de Barbara Pargas
Barbara Pargas
Psicóloga con mención clínica, egresada de la universidad Bicentenaria de Aragua, Venezuela. Con estudios en neuropsicología, psicología organizacional. Acompañamiento psicológico. Manejo de terapia cognitivo - conductual, ACT, activación conductual, mindfulness. Asistiendo a niños, adolescentes y adultos. Manejo de crisis, procesos de duelo migratorio, trastornos psicoafectivos, trastornos del neurodesarrollo en adultos.
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