Hablar sobre la dependencia y las drogas jamás es un tópico agradable para muchas personas, y es cierto que puede llegar a acarrear una cantidad inimaginable de debates al respecto, pero aquello que jamás se puede negar es como la drogodependencia es un trastorno que afecta al cerebro y el comportamiento, el consumo de sustancias genera un efecto negativo en el cuerpo humano, la salud y el día a día de cada persona. Sus efectos en la salud son incontables, pero también afectan nuestro entorno, amigos, familia y los objetivos personales.
La drogodependencia se trata de un problema de salud a causa del consumo frecuente, considerado y sin control de diversos tipos de sustancias o drogas. Está fuertemente caracterizado por la búsqueda compulsiva del uso y consumo, pese a ser conscientes de las consecuencias negativas que puede acarrear para la salud, en especial para evitar otros efectos negativos como la abstinencia.
Es un trastorno recurrente, del hábito de consumir, es decir, que por lo general las personas drogodependientes mantienen esto por un tiempo considerable y, de dejar el consumo, pueden llegar a recaer.
La OPS (organización panamericana de la salud) lo dice muy claro: las drogas son sustancias que actúan sobre el sistema nervioso y que generan alteraciones en las funciones regulares. Con esto dicho, es plenamente lógico considerar que sus efectos son nocivos para la salud.
Lo primero que hay que comprender es que la dependencia y la adicción son, en teoría, cosas distintas. La dependencia está caracterizada por el síndrome de abstinencia, lo cual nos deja ver que es posible dejar el consumo, no hay síndrome de abstinencia en consumo. A su vez, una persona drogodependiente puede llegar a tener control de algunas áreas de su vida, por lo que aún es capaz de cumplir con obligaciones.
En cambio, la adicción es un estado casi intacto de uso de sustancias, es cuando parece imposible dejar de repetir la conducta de consumo, pese a reconocer lo negativo en ello. La persona adicta, a diferencia de la drogodependiente, pierde el control casi total de las áreas en su vida, y experimenta la constante lucha para cumplir obligaciones que, en la mayoría de las veces, es incapaz de lograr. Dicho de otra forma, podría decirse que la dependencia es el paso previo a la adicción.
Entendiendo la diferencia entre adicción y dependencia, es imperativo conocer los efectos de la drogodependencia en la salud, tanto física como mental. Y Lamentablemente en la actualidad se tiene demasiado normalizado el consumo de drogas que, por fuera, mucha gente considera inofensivas. Recreacionales, de bajo impacto, etc., pero la verdad es que en mayor o menor medida, el uso repetido y prolongado de cualquier sustancia capaz de alterar al cerebro favorecerá el desarrollo de problemas de salud, cómo trastornos, o el funcionamiento de la persona en varios ámbitos de su vida, familia, amigos, laboral y hasta personal.
Así mismo, para el cerebro el consumo se siente como una tabla de recompensas. Pese a tener un castigo al final, el placer que genera su consumo es proporcionalmente para mucho más conveniente que dejarlo, generando cambios funcionales, que pueden persistir mucho tiempo después de abandonar el consumo de drogas.
La drogodependencia puede llegar a llevar a la persona a tener comportamientos de riesgo que pongan su vida en peligro.
Según el Instituto Nacional de Abuso de Drogas, se ha demostrado que el consumo frecuente de drogas y su dependencia tiene un gran impacto en el desarrollo de trastornos psicológicos debido a la exposición constante del cerebro a multitud de sustancias que alteran su química, composición y percepción.
Sí. La drogodependencia no es una etiqueta, así como la drogadicción no define a nadie, por lo tanto: se puede salir. Si crees que estás pasando por un momento complicado con la dependencia en sustancias o temes que alguien que aprecias está cayendo en ello, en Mente Sana estamos aquí para ayudarte a iniciar hoy mismo tu recuperación con ayuda de especialistas. Además, hay diversas opciones que se pueden tomar para buscar ayuda:
Y no, una recaída no es fallar. Solo hay que seguir trabajando. Sigue tu tratamiento, evita el riesgo y busca apoyo.
A veces, también tendemos a olvidar que los efectos involucran a terceros que se ven afectados, pero ¿qué puedo hacer entonces si he caído en la adicción y cómo está afectando esto a mi salud? Con apoyo y determinación es posible salir de ello, la dependencia no define a nadie.
Así que recuerda, si necesitas apoyo, en Mente Sana estamos para dártelo, recibe ayuda hoy mismo y agenda tu cita gratuita y empieza junto a nosotros un proceso para liberarte de la carga y permítenos ayudar.